El huevo y la gallina
28 junio, 2018
¿Por qué son tan buenos nuestros tomates?
¿Se han preguntado porque los tomates que se encuentra en tantos lugares con un aspecto rojo impecable son tan insípidos? El culpable es un sistema de producción que promueve la cosecha cuando los tomates aún son verdes para ir madurando en los trayectos entre el lugar de recolección y punto de venta. Al madurar fuera de la rama se interrumpe el proceso natural en el que el almidón se transforma en azúcares. Los tomates cogen el color rojo pero no el sabor dulce característico de una buena maduración.
Para madurar bien, los tomates necesitan una temperatura entre 20 ° y 35 °C y muchas horas de luz. Depende de si el calor aprieta pronto o no durante la primavera se adelanta o retrasa nuestra temporada de tomates. Las plantas van cargadas de frutos y esperamos que maduren antes de cosecharlos. Estos adquieren un sabor rotundo, una mezcla exquisita entre dulce y ácido. "¡Cómo los de antes!", nos dice la gente.